Wednesday, March 21, 2007

Señalización urbana (su culo está aquí)

Era hora de que alguien hiciera algo con ésas plataformas informes que flanquean las entradas de los vagones de tren! No sirven para apoyarse sin que te duela la cadera, no sirven para sentarse sin que te resbales, no podés acostarte en ellas, no podés sentarte debajo... para qué mierda sirven?
Bueno, algún paladín de la justicia callejera se dedicó en esta extraña plataforma a explicar su correcta utilización con un diagrama que simplemente indica qué y dónde: su culo, aquí.
Ojalá hubiera más como éste diseñador de marcador indeleble que se dedica a simplificarnos la vida, un asiento a la vez.







Hijodeputómetro: QUEHIJO...!

Volví, HDPS!

No, no me fui de vacaciones ni nada. Fue olvido, descuido o aburrimiento. Llámenlo como quieran. No me importa.
Les traigo una sorpresita, un pequeño suvenir de las calles porteñas que encontré tirado temprano una mañana. Al parecer ese mito urbano de que existe una tribu caníbal que da vueltas por el microcentro en busca de bancarios descuidados y cadetes empuñando Filcars es verdad. Uno pensaría que son más cuidadosos tratando de ocultar sus pistas, pero...
Mi único consuelo: este puede ser el fémur del cajero del Banco Río que una vez me hizo echar del banco porque se negó a cambiarme un billete de 20 pesos después de 30 minutos de cola y lo puteé de arriba abajo tanto que quedó bañado en un overol de insultos. Si cuando hablan mal de uno te pica la oreja, a la madre de este tipo le debe haber explotado el tímpano izquierdo y haberse quedado con el derecho sangrando.

Hijodeputómetro: QUÉHIJO...!